sábado, 30 de marzo de 2013

Reporte Colectivo del Capitulo IV de Psicologia de las Minorias Activas de Serge Moscovici


MINORÍAS Y MAYORÍAS

En este capitulo cuatro, Moscovici nos plantea su visión hacia la influencia social, es decir, introduce su modelo genético, por el cual esta conformado por las mayorías y particularmente las minorías activas y nos plantea su primera proposición para su modelo genético que se plantea así:”Cada miembro del grupo, independientemente de su rango, es una fuente y un receptor potenciales de influencia”.

El punto más especial para Moscovici es que la visión de los fenómenos de influencia exige que consideremos la minoría, el individuo y el subgrupo en función del impacto que pueden tener en la opinión del grupo. Además de que la influencia se ejerce de dos direcciones: de la mayoría hacia la minoría y de la minoría a la mayoría, es decir, hay influencia cuando cada individuo y subgrupo, independientemente de su status, actúan sobre los otros, que al mismo tiempo lo hacen sobre ellos. Aquí la influencia es un proceso reciproco que implica acción y reacción, en el cual la mayoría que intenta imponer sus normas y su punto de vista a la minoría sufre al mismo tiempo la presión que ejerce esta minoría para hacerse comprender y para hacer aceptar sus normas y su punto de vista.

Las actividades de la sociedad, en su conjunto o de un grupo, conducen siempre al establecimiento de una norma y la consolidación de una respuesta mayoritaria. Una vez que esta norma y esta respuesta han sido elaboradas, los comportamientos, las opiniones, los medios de satisfacer las necesidades, y en realidad todas las acciones sociales, se dividen en 4 categorías: lo que esta permitido y lo que esta prohibido, lo que esta incluido y lo que esta excluido.

Cuando una minoría intenta influir a la sociedad en relación a las normas o respuestas fuertemente interiorizadas, encuentra una mayor resistencia. Hay una distinción entre la realidad física, la cual es la que pide solo la intervención de un aparato sensorial o técnico para la validación de los juicios y las opiniones; y la realidad social la que exige el consenso del grupo.La diferencia entre esas dos realidades, esta en el hecho de que, en ciertas circunstancias, el consenso desempeña un papel indirecto en el proceso de validación, mientras que, en otras circunstancias, intervienen directamente.

Existen sin duda, razones suficientes para que la gente permanezca en grupo y no lo abandone espontáneamente, ni siquiera en situaciones muy penosas. Lo anteriormente mencionado se puede observar en el experimento de Milgram, que habla sobre la obediencia a la autoridad, es decir, las personas tienden a dejarse arrastrar por ciertos grupos y unirse a estos porque satisfacen sus necesidades y sus ideales, porque refuerzan ciertos valores y ciertos comportamientos. Las personas normales y los comportamientos normales representan la autoridad del súper-yo, evocan los aspectos mecánicos y rígidos de la vida. En cambio, las personas y los comportamientos desviantes sugieren la posibilidad de desobediencia al súper-yo, invitan a la liberación de los movimientos impulsivos y sancionan la espontaneidad del comportamiento, es decir, dan acceso a lo desconocido, a lo original y a lo sorprendente.  

La divergencia o la desviación constituye una transgresión y puede considerarse como anomica; en el segundo deriva de una oposición consciente a una norma y de la afirmación de soluciones de recambio, y puede considerarse como nómica, igualmente resulta una cuestión de conformidad a las normas que prevalecen en un grupo diferente. Conviene también tener en cuenta, la dirección de esta divergencia del desviante o de la minoría: en suma el hecho de que la minoría, es o bien ortodoxa (pro-normativa), es decir, pone el énfasis en la norma mayoritaria y es la única que puede ejercer influencia sobre el grupo, ya que preconiza una norma aceptada socialmente o bien heterodoxa (contra-normativa), es decir, le opone una norma minoritaria, y puede que ofrezcan algo nuevo al grupo o presenten una perspectiva diferente, y por ello, provoquen un conflicto, que puede impulsar al grupo a cambiar.  

Las minorías anomicas, los individuos o subgrupos definidos por su referencia a la norma o a la respuesta del sistema social más amplio, porque el grupo al que pertenecen no posee normas y respuestas propias; y las minorías nómicas, adoptan posición distinta por contraste o por oposición al sistema social más amplio.

Nemeth y Endicott hacen notar que la relativa eficacia del contraste importante al situarse en el mismo campo no provenía del hecho de ser considerado como una posición aceptable, buena o razonable. Biener (1971), realiza en su estudio que el blanco de influencia era la precepción del color por los sujetos. Paicheler (1974), en su estudio versa sobre la polarización de las actitudes en los grupos, es decir, sobre el hecho de que es durante y después de la interacción social los grupos tienden a adoptar posiciones mas extremas que las de miembros antes de la interaccion. Sherif y Hovland (1961), muestran que los receptores de un mensaje modifican su actitud en la dirección que se aproxima a la fuente del mensaje, cuando la posición de la fuente es próxima a la suya: efecto de asimilación; o cuando su posición este alejada de la actitud de sus receptores: efecto de contraste. Mugny (1974), en su estudio nos habla sobre el punto de vista ortodoxo que tendrá mas influencia cuando se presenta con rigidez que cuando se presenta de modo vacilante, al contrario de lo que ocurrirá con el punto de vista heterodoxo.La ortodoxia tiene, por tanto, un impacto mucho mayor que la heterodoxia, pero únicamente si las posiciones son presentadas de modo coherente. 

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